Jossman no para de producir, su mente está en constante movimiento. En cada encuentro con sus seguidores asegura que algo grande pronto llegará. Crea y cree en un movimiento que va de la mano del afrobeat y él a gestarse como todo un ‘afroking’.
Este caleño, criado en Timbiquí y formado como productor en Bogotá está convencido en que el camino del éxito está cimentado en la disciplina. Y sin dudarlo asegura que reencontrarse con sus raíces ha sido el norte para lo que desea lograr.
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Sonidos autóctonos de Latinoamérica lo acompañan en su propia producción, siempre inquieto realizó un viaje por diferentes géneros hasta que se encontró en el afrobeat parte de su identidad.
“El afrobeat es un género musical que viene de África, al que le estoy colocando ese ingrediente que tiene el Pacífico y tiene mucha similitud con el folclore como es el currulao, bunde, la juga que hacen sentirlo muy familiar”.
Esta música le permite ser, fluir y hablar de sus raíces, su jerga y lograr una mixtura de los sonidos que lo han acompañado en su niñez y adolescencia.
Un viaje de exploración
De adolescente le gustaba mucho más la salsa, pero siempre estaba explorando desde el hip hop cuando escuchaba artistas como Vico C y Bee boy. Tuvo un grupo de hip hop y las canciones que cantaban tenían sentido social.
“Siempre tuve la inquietud de poder fusionar el folclor con la música urbana, con los sonidos del Pacífico” aseguró Jossman.
El haber participado del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, en el 2007, con una propuesta de reggaetón con folclor, en la categoría Libre, le permitió empezar esa búsqueda.
“Soy muy afortunado de estar impregnado del Pacífico en mi música, y es algo que simplemente fluye, se da de manera natural. Me siento genuino y siento que va conectado con mi ser”.
Cosecha de Timbiquí
Recorrió diferentes géneros, pasó por el hip hop hasta volver a la esencia, lo orgánico y lo que llega el folclor colombiano y latinoamericano.
Estudió un semestre de arquitectura en la Universidad del Valle. “Mis padres estaban super felices, menos mal me di cuenta que no era el camino empezando el primer semestre, así que no se perdió tiempo y tampoco mucho dinero y gracias a Dios pude tomar la mejor decisión de mi vida”.
Siempre ha sido fiel a su sentir, “me considero un guerrero porque estoy batallando con una música que no es popular en nuestro territorio; que la gente la escucha y dice esto está rico pero no sé qué es y venimos haciendo esa pedagogía”.
Jossman, que trabajó como productor de Kevin Roldán, Manuel Turizo, Duki, entre otros artistas, le dio un giro a su carrera. “He dejado que la música abra las puertas, las colaboraciones son genuinas. Creo que llegó el momento de salir al ruedo”.
Confesó que en un momento sintió miedo, “cuando era el productor de Kevin Roldán, en las giras él me invitaba al escenario y a mí me daba mucho miedo por esa razón decidí, con mi manager, no salir al escenario hasta no tener una canción propia y conocida. No quería salir con un tema que no fuera mío, tampoco hacer covers y así se dio gracias a Dios”.
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Su proyección
Es enfático al afirmar que esto solo se logra si se cuenta con planeación, disciplina y un equipo de trabajo comprometido.
Mientras sigue dándole forma a su proyecto musical espera verse en cinco años con su disquera, con la escuela de producción musical más importante de Colombia funcionando en Cali para apoyar a los artistas de la región.
“Espero que se eduque al artista no solo en lo musical sino en el negocio de la música que es tan importante y que tanto hace falta en este territorio del país y la preparación sicológica para esta labor”.