Llegamos a Villeta, municipio de Cundinamarca, con la intención de pasar unos días de descanso. ¡Lo logramos!
A hora y media de Bogotá, en vehículo particular, se encuentra este destino que ofrece hermosos paisajes, buena gastronomía y diferentes alternativas para el descanso.
El primer contacto con este municipio fue en el parque central, en donde se rinde homenaje a sus habitantes, campesinos que cultivan la tierra y que en su gran mayoría están dedicados a la elaboración de la panela, producto que es utilizado en la creación de dulces y bebidas.
Recuerda pedir un guarapo de panela. La sirven en botella como si fuera una soda o una cerveza, es una bebida fermentada, refrescante que se toma bien fría.
Seguimos a La Vega
La segunda parada nos llevó hasta La Vega, otro municipio de encantadores paisajes y una interesante oferta turística que ofrece hoteles, hostales, fincas y la tendencia del momento: los glamping.
Nos encantó la propuesta ofrecida por Butulú Glamping. Paisaje, comodidad y calidad en atención hicieron de la estadía un paseo placentero y de descanso.
Este glamping, que está en el cerro del mismo nombre, ofrece un clima agradable, por eso es indispensable el uso de un bloqueador solar, una gorra que proteja y calzado cómodo para realizar caminatas ecológicas.
Brindan servicio de comedor y muy cerca se pueden encontrar restaurantes con una oferta gastronómica que incluye platos típicos e internacionales. Uno de los restaurantes que recomendamos es Los Naranjos
Hospitalidad, paisajes, naturaleza, avistamiento de aves, turismo rural hacen de estos municipios ubicados en Cundinamarca uno de los destinos para el descanso y el turismo sostenible.