En el occidente colombiano está listo un reto que involucra el ciclomontañismo, el estado físico y la conservación de un ecosistema. Rutas exigentes, paisajes majestuosos y piernas de acero exige la Travesía Páramo de Moras, en el municipio de Silvia, Cauca, una competencia que reúne pedalistas, turismo y conservación del territorio.
Esperan contar este 16 de noviembre con 500 ciclomontañistas que se desplacen desde municipios del Valle del Cauca y Cauca para participar en una competencia que combina esfuerzo físico, contacto con la naturaleza y respeto por el entorno ambiental.
Los deportistas atravesarán impresionantes parajes del Páramo de Moras, un ecosistema de altura que sorprende por su biodiversidad, su aire puro y su tranquilidad. La ruta —exigente en sus ascensos y técnica en sus descensos— está diseñada para poner a prueba la resistencia de los participantes, pero también para regalarles una experiencia visual y emocional incomparable.
Un páramo lleno de vida
El Páramo de Moras, ubicado a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, es uno de los tesoros naturales mejor conservados del Cauca. Su geografía montañosa, cubierta de frailejones, bosques nublados y fuentes hídricas, ofrece condiciones ideales y seguras para la práctica del ciclomontañismo. Este destino sobresale por ofrecer un ambiente tranquilo y controlado, donde el respeto por la naturaleza es la regla principal.
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Los organizadores del evento han dispuesto puntos de control, asistencia médica y acompañamiento logístico en todo el trayecto, garantizando una experiencia deportiva segura y responsable. Además, la colaboración con las comunidades locales refuerza el compromiso ambiental y social del evento, promoviendo prácticas sostenibles y la conservación del ecosistema.
Silvia: un destino deportivo en crecimiento
Silvia no solo es conocida como la Suiza de América, sino que es un lugar donde la cultura indígena, la naturaleza y la aventura conviven en armonía. Reconocido por su herencia misak, sus paisajes de montaña y su hospitalidad, el municipio se posiciona como un nuevo epicentro del turismo deportivo en el suroccidente colombiano.
El Reto Páramo de Moras forma parte de una estrategia de promoción territorial que busca visibilizar el potencial natural y cultural de Silvia ante los ojos del país. Al atraer deportistas, familias y visitantes, el evento impulsa una dinámica económica local: los hoteles, posadas rurales y fincas turísticas amplían su oferta; los restaurantes ofrecen platos típicos como la trucha y los amasijos tradicionales; y el mercado indígena invitan a conocer productos artesanales y agroecológicos.
Deporte, comunidad y desarrollo local
Más allá del aspecto competitivo, el Reto Páramo de Moras representa una oportunidad de reencuentro con el territorio. Cada pedalazo se convierte en una forma de apoyar el comercio local y de reconocer el esfuerzo de las comunidades que mantienen viva la identidad silviana.
Este tipo de iniciativas también deja huella social. Motiva a jóvenes y adultos a adoptar hábitos saludables, impulsa la práctica del ciclismo como herramienta de integración y despierta el orgullo regional por un entorno natural privilegiado.
Un destino para pedalear y descubrir
El Reto Páramo de Moras no termina en la meta. Quienes se aventuren a participar podrán extender su experiencia disfrutando de los atractivos turísticos del municipio: el mercado indígena de los martes, las lagunas de las Delicias y Chimán, los miradores naturales o los senderos que conducen al corazón del páramo. Todo ello convierte a Silvia en un destino perfecto para quienes buscan pedalear entre montañas y conectar con la esencia de los Andes del Cauca.
Así, mientras el ciclomontañismo sigue creciendo en el suroccidente colombiano, Silvia se consolida como un referente del turismo sostenible, donde cada kilómetro recorrido es una invitación a cuidar, disfrutar y valorar el territorio. La Travesía Páramo de Moras no es solo una competencia: es una activación del destino y un reconocimiento al esfuerzo de los moradores, al cuidado de la naturaleza y la preservación de la cultura que al sumarse hacen del Cauca un destino inolvidable.
